Principalmente siguiendo tres pautas:
Limpiar muy bien la piel por la mañana y por la noche (con más razón si te has maquillado). Lo recomendable es hacerlo con un producto que no sea agresivo para la piel (yo utilizo el llamado Pan Dermatológico, que tiene el aspecto de una tradicional pastilla de jabón). Da un poco de pereza al principio, pero pronto se convierte en una rutina. Ayuda a que cualquier producto que te apliques después penetre bien en la piel.
Usar una hidratante DESPIGMENTANTE/ANTIMANCHAS durante el año, por la mañana y por la noche. Hay cremas específicas con esta función, y otras con otros principios activos como la Vitamina C que ayudan a unificar el tono de la piel.
Usar SIEMPRE protección solar de mínimo SPF50. Ya sea verano, invierno, vaya a la playa o no. Una vez que te acostumbras no cuesta nada y sigues bronceándote. No te quemas, por lo que no lesionas tu piel, y ésta está siempre protegida.
Yo he usado todo el año el serum antiedad y antimanchas y la crema con protección 50 (también despigmentante) de los laboratorios NEORETIN. Me ha ido muy bien.
Ahora estoy probando la crema Pro Renove (anti-edad y unificate, con Vitamina C) y el solar (antimanchas y unifican también) de Roc. De momento la textura y el olor de la hidratante me encantan. Sobre los efectos… ¡ya veremos!
Lo que me han recomendado en varias ocasiones es usar, para el día, las dos cremas por separado: primero un sérum o crema hidratante con los principios activos que quieras para tu piel y luego la protección solar. Hay laboratorios que ofrecen una crema hidratante con principios anti envejecimiento o despigmentantes y protección solar, todo en uno. Estas cremas tienen una concentración de principios activos mucho más baja que si no tuvieran protección solar, por lo que la fórmula de utilizar primero la crema hidratante y luego la solar es mucho más eficaz.
Hay otras pautas que ayudan a prevenir la aparición de manchas en la piel, como son:
Exfoliar tu piel regularmente
Incluir en tu dieta muchas frutas y verduras de temporada
Huir del sol y no exponer la cara directamente al sol (usar gorras, sombreros…)
En casos crónicos acudir a un profesional y recurrir al láser, la microdermoabrasión o el peeling
Yo confieso que no he seguido las tres primeras lo suficiente, y seguro que me habría ayudado. ;-)
Lo que sí hice, y creo que absolutamente recomendable, es acudir a un especialista: a un dermatólogo. A la vista de tu piel, tus hábitos y tu genética… es quien mejor te puede asesorar. ¡Feliz fin de semana!
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